los pollitos son para distraer de lo feo que es el pain perdu |
Tras la emoción y la intensidad de mi última entrada (y mi agradecimiento por vuestros cariñosos comentarios), hoy vengo mucho más prosaica. Resulta que se acerca la Semana Santa y yo estoy lejos de mi mami que hace las mejores torrijas del mundo mundial... ¿sentís mi desesperación? Es profunda y desoladora.
Así que tenía dos opciones: pedirle la receta de sus torrijas a mi madre que, como es habitual, me lo diría todo a ojo y nunca me quedarían como a ella, o aprovechar la ocasión para hacer una receta que tengo pendiente hace lustros: el pain perdu. Las torrijas francesas, vamos. Pero si iba a hacer pain perdu, tenía que ser con una receta con garantías, así que eché mano (es un decir) de Michalak, ya sabéis, el gran chef repostero que me inspiró el financier de fresa y pistacho y la tarta tatin individual semiesférica.
La receta de base del pain perdu es parecidísima a la de las torrijas, aunque con algunas pequeñas variantes: en Francia se hace casi siempre con pan de brioche, se usa más nata que leche, y sobre todo no se fríe en aceite sino que se tuesta en mantequilla. No obstante, como las diferencias son mínimas, pensé que el sabor sería muy parecido... ¡qué equivocada estaba! Me ha parecido menos dulce pero más empalagoso, quizá por la nata o por la textura de la brioche. Mi madre empapa las torrijas en almíbar, así que estoy acostumbrada a que estén muy jugositas; el pain perdu me pareció demasiado seco (y eso que estaba tan empapado que me costó dios y ayuda darle la vuelta en la sartén sin que se me hiciera papilla!). Eso sí, me gustó poder evitar la fritanga y el tostado caramelizado les da un crujiente que es muy especial. Ayer, la gran Virginia de Sweet and sour publicó una receta usando este mismo proceso, pero con pan de torrijas casero y montando un delicioso postre alrededor de las torrijas, y dice que le encantó la caramelización. Sí, es una buena idea y evita la fritura, pero para mí, la verdad, no hay color:
Mi Mami 1 - Chef Michalak 0
Lo siento, Christophe. Eres la pera limonera, pero la verdad es que las torrijas de mi madre son mejores que tu pain perdu. Las cosas como son.
Venga, os dejo la receta para que os animéis y me digáis quién, para vosotros, gana el duelo torrijas vs. pain perdu!
aquí el pollito verde se había hartado de posar |
Consejos:
- No veo el interés de que el pan repose una noche entera en la nevera, porque no lleva nada que lo aromatice y necesite su tiempo... Lo hice de un día para otro, como indica la receta, pero no creo que sea necesario.
- Cuidado de no tener la sartén a fuego demasiado vivo para evitar que se queme el caramelo.
Ingredientes:
- 8 rebanadas de brioche
- 1 yema de huevo L
- 160g de nata líquida
- 40g de leche
- 2 cucharadas soperas de azúcar
- mantequilla y azúcar moreno
Elaboración:
En un bol, batir la yema con el azúcar, añadir la nata y la leche.
Verter en un recipiente rectangular.
Cortar las cortezas de la brioche (si se desea) y mojarlas en la mezcla anterior. Colocarlas en el recipiente, tapar con papel film y dejar unas horas, o incluso la noche entera, en la nevera.
En una sartén, derretir un buen trozo de mantequilla y espolvorear con un par de cucharadas de azúcar moreno. Dejar unos minutos que se derrita, y colocar las rebanadas de brioche que os quepan en la sartén. Esperar un par de minutos para que se caramelice, y con una espátula darle la vuelta para que se caramelice del otro lado.
Repetir la operación añadiendo más mantequilla y azúcar y tostando el resto de brioches.
Servir de inmediato o calentar brevemente en el horno antes de servir.
Mmmmmm, no se cómo serán las torrijas de tu madre pero estas tienen una pinta riquísima!!
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake
DÍ QUE SÍIIIIII, Ole tu mami, porque no tengo su "guachi" que si no, le mandaba uno ahora mismo dándole dos besarracos!!!!. Señora, Vd sí que sabe y no el Michelele ese, cuyos pains perdus son parecidisimos a los "pains quemaos" que prepara mi madre para desayunar, que no hay quien se los coma, que esos están directamente calcinaos, menos mal que Dios me ha dotado de unos buenos dientes para morder, (es que la pobre no tiene ni idea de cocinar...jajaja, ahora que no me lee, bueno, no me lee ni a mí, te va a leer a tí....jajaja, así que en ese aspecto estoy la mar de tranquilo). Que sí, que yo prefiero las torrijas de toa la vida. Los pollos mu monos, sí señor, pero mira, ni ellos quieren el pain perdu...jajaja. Un beso corazón que me piro, vampiro. Disfruta de la Semana Santa.
ResponderEliminarLo que me he reido¡¡¡ Mami siempre por delante di que si. La verdad es que una torrija caramelilzada es distinta a las fritas, tiene a su favor el crujiente exterior, pero claro no son tan "jugosas" y digo jugosas y no aceitosas que sería mas lo real, pero.... y lo rica que está esa fritura por Dios. En casa las tradicionales no las perdonan como ya te conté y eso será por algo. En fin que todas ellas están de muerte y de engordar un mogollon, pero uan vez al año no hace daño. Gracias por el enlace preciosa. Bss y a disfrutar de la semana Santa.
ResponderEliminarVirginia "sweet and sour"
Yo no tengo tradición de torrijas en casa, ya que me las hacía mi abuela cuando era pequeña pero las preparaba durante todo el año. Mi madre JAMÁS nos hizo torrijas, qué poca vergüenza :P.
ResponderEliminarDesde luego, las torrijas de tu madre nadie las podrá igualar jamás! Aunque reconozco que sí tiene buena pinta este pain perdu (no soy yo golosa ni nada, jajaja). Es curioso que las "torrijas francesas" se llamen pain perdu, y luego los anglos llamen a "sus" torrijas "french toast"; cosas de la vida!
Un besazo
Bueno, yo no las veo tan feas. Me recuerdan a unas torrijas de pan bimbo que hizo mi madre un año, es que es francesa la pobre, jajaja, en algo se tenía que notar. Rico seguro que está todo, no lleva nada que esté malo, como dice mi hermana. Acabo de ver tus gotitas de merengue y frambuesa y leer tu entrada, estuve sin internet decente unos días y no había tenido la oportunidad. Vaya historia, entiendo perfectamente de qué va, mi mejor amigo (el fotógrafo que es como mi heramano) lleva 6 años diagnosticado de esclerosis múltiple y cada vez va a peor, tiene 21 años, pero se lo toma con calma. Más que yo desde luego. Pero qué vamos a hacer, la vida es así a veces, hay que vivir en el día. Un besito, guapi, disfruta de tus torrijitas modernas, jajaja.
ResponderEliminarPues mis torrijas son tipo pain perdu. Las suelo hacer con pan de molde, mojadas en leche aromatizada, pasadas por huevo, a la plancha y después el típico azúcar y canela y sinceramente, me gustan más que las torrijas tradicionales. A mí es que tanto aceite me mata. Desde luego, que no he probado las torrijas de tu madre, pues puede que me acaben gustando más. Y tu pain perdu, no me parece nada feo, lo veo muy muy apetecible. Besitos y que pases una buena semana santa.
ResponderEliminarHola guapa! Acabo de conocer tu blog y me ha gustado mucho! jeje! Por aquí me quedo para no perderme nada! ;)
ResponderEliminarKissitos!!
Pues no tienen mala pinta. De hecho se ven muy ricos. Ahora sí, también he de confesar que la última vez que comí una torrija tendría yo 7 u 8 años. Las hacía mi tía-abuela. Mi madre nunca nos ha hecho torrijas, o sea que el Michalak tiene oportunidades de conquistarme... sobretodo si son sin fritanga! jajajajaj
ResponderEliminarAunque bien pensado, tu madre no podría hacer unas cuantas para ti y para mí y así comemos una torrijas caseras? Mucho mejor, no??? :)
besos guapa!
Hola cielo, yo soy muy fan de la pastelería francesa, pero he de reconocer que cuando se trata de hacer torrijas, gana España, como en los mundiales :P Sin embargo es una receta muy interesante, y el punto del brioche me encanta, y la nata, quizás queden secas porque estamos aconstumbrados a freirlas y empapa mucho aceite. Prueba a hacer esta misma receta al horno, como yo te he propuesto en mi blog, y veremos cual es la diferencia. Un abrazo guapetona
ResponderEliminarJajajaja Ya se sabe, a veces las madres ganan a todos los Christophes del mundo! Y el pollito verde se cansó de tanta foto? jejeje. Muy chulo todo,María. Tienen muy buena pinta aunque digas que has puesto los pollitos para disimular.
ResponderEliminarUn beso
Pero qué duda cabe, a dónde va a ir a parar, pero si hasta el nombre es mejor en castellano, "TORRIJA" XDD Nunca he probado el pain perdu, pero en este caso me quedo con lo tradicional, este tipo de repostería, no se cambia ni se mejora, la receta a ojo de las madres y las abuelas, son excepcionales, aunque nos vuelvan locos con las cantidades...jejeje!!! Y menuda pintaza tienen que rico por favor!!! Besitos
ResponderEliminarCarlos-Chocoboss
Irresistiblemente deliciosas...que ricas y ese doradito, dan ganas de morder al momento!!!
ResponderEliminarBesos y buena vibra!!
Pero seguro que tu mami te la hace en cuanto vayas a verla ;)
ResponderEliminarYo no soy mucho de torrijas y, claro, tampoco de Pain perdu, pero las raíces me tiran mucho más a tu receta. La intentaré. Un beso
Tengo la boca salivando..... Munnnnnnn rico, rico.
ResponderEliminarBesos. La Cocina de Trini Altea
Las veo explendidas!! tienen que estar de vicio, bicos
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