Crónica de la Feria SUGAR PARIS

Aquí estoy por fin con mi crónica de la Feria SUGAR PARIS y, sobre todo, con muchas, muchísimas fotos! Tengo que decir que cumplió con las altas expectativas que tenía y que me encantó. Único inconveniente: la enorme cantidad de gente que había... Era bastante agobiante, y muy incómodo, porque los expositores no tenían "puestos" como en el mercado, sino minúsculas tiendas (monísimas por cierto), pero a ratos no se podía uno ni mover. El sábado me fui a las 4 (la feria cerraba a las 6), y la cola de gente esperando para entrar salía del edificio y daba casi la vuelta a la manzana... Era el primer año que lo organizaban y creo que se vieron totalmente desbordados por el éxito de público! Aunque debo decir que la organización era impecable y que para ser el primer año, la calidad de los expositores, del programa y de la estética general del evento me pareció altísima.


Aunque no me gusta nada madrugar, y menos en sábado, había decidido coger en Bruselas el tren de las 7.43 para llegar pronto a París. Una vez llegada, hora y pico después (qué cerca estamos...) cogí el metro, y en media hora estaba en la otra punta de la ciudad gracias al maravilloso y rapidísimo metro de París. Al salir del metro, no sabía por dónde tirar, pero me di cuenta que un buen número de mujeres iban como en procesión todas en la misma dirección y pensé: las sigo, que éstas son de las mías!! Efectivamente, así era. 

Hacía un día espléndido, calorcito, sol, el cielo bien azul, y mi primera sorpresa es que al llegar al "recinto ferial", me encontré con que estaba situado en el Parc Floral de Vincennes... y me quedé boquiabierta. Mi enamoramiento con París no decae con los años, y en momento así, pienso: jo, es que en París son bonitos hasta los recientos feriales (que son horrorosos en cualquier otro sitio).

No me resisto a compartir con vosotros algunas de las fotos que hice en el Parc Floral para que veáis que no exagero:

Emocionada ya por estar en mi París de mis amores y por la belleza del parque, llegué a la entrada de la feria a las diez menos diez. Abrían a las diez, pero ya había cola en las puertas de entrada... Menos mal que una vez que abrieron no tuve que hacer cola, porque pasé por la entrada especial prensa y blogueras. Por cierto: grandísima ilusión ver a Pastélite en la guía de los visitantes de la feria:

¡abajo a la derecha!

Una vez dentro, como no sabía por dónde empezar, decidí dar un paseo general y hacer fotos para compartir con vosotros en el blog: ¡en buena hora! Porque según empezó a llegar gente y a llenarse aquello, hacer fotos potables se convirtió en misión imposible. He tenido que borrar muchísimas, y otras muchas están movidas, pero espero que seáis comprensivos!

Empezaré por enseñar los diferentes tipos de talleres que había (los de pago eran en una zona cerrada, así que no hay foto).

Ésta era la zona de demostraciones (donde el público quintuplicaba el número de taburetes!)

En muchísimos puestos, había demostraciones gratuitas muy chulas. 
Toda mi admiración para los instructores que se pasaron horas y horas haciendo lo mismo, siempre con una sonrisa y respondiendo a todas las preguntas...

Aquí un taller de cupcakes de Vahiné:

Una señora inglesa (que no hablaba ni media palabra de francés) enseñando cómo utilizar sus moldes de silicona para fondant:

Una chica simpatiquísima que enseñaba cómo decorar cupcakes, galletas y tartas con pasta de azúcar.Era tan simpática y tan entusiasta que casi me convence a mí que soy anti-fondant, jajaja!

Un taller gratuito de fotografía culinaria (la única condición era llevar alguna creación tuya, lástima no haberlo sabido!)

Un taller de chocolate. El Chef, súper majo, terminó preguntándome si era portavoz de todo el público porque estuve una hora ahí pegada a él bombardeándole a preguntas... Fue muy interesante y aprendí un montón de cosas.
(nótese que en una de las fotos una mano de alguien del público roba una almendra!)

Ésto no era un taller, pero es para enseñaros que vinieron los de la tele!

Me querían entrevistar, por supuesto, es bien sabido que soy una celebrity, pero tenía ojeras de haberme levantado a las 6 de la mañana y dije que no. 

Vamos ahora con las diferencias creaciones artísticas expuestas, por supuesto todas de fondant. Un fraisier o una St-Honoré no aguantan 8 horas al aire libre en un local sobrecalentado...

Ésto era lo que hacía la inglesa que sale más arriba: 

 

Y ésto es una tarta. Sí, lo que oís. Se escapa de mi entendimiento que a alguien pueda apetecerle comerse eso de postre, pero para gustos, colores, no?

 

A continuación, algunos de los materiales y utensilios que había. Como he dicho, no pude hacer fotos de todo, pero había muuuuuchas cositas y muuuuchas tentaciones...

Cápsulas para todos los gustos:

 Cortadores a gogó:

Hojas transfer para chocolate:

Colorantes de toda clase y condición:

Más colorantes y brillibrillis:

Aromas artificiales. Verlos así todos juntos me echó un poco para atrás... La verdad es que nunca los uso.

Una curiosidad: las varillas más grandes que he visto en mi vida. ¡Eran tan largas como mi brazo entero! ¿Alguien sabe para qué sirven? Seguro que Jose, de Aisha Kandisha, sí.

Cápsulas de cartón y adornos monísimos:

También había muchos puestos de decoración y artículos para fiestas.

Por ejemplo tartas de chuches:

 "Packaging" chulísimo de una empresa española, por cierto, que tenía el suelo cubierto de algodón como si fuera una nube...

Azucarillos de formas y colores muy cuquis (y a precio de caviar)

 

 

 Vasos, platos, pajitas, bolsas y servilletas para todos los gustos!

   

Vajilla inglesa y la nueva colección de Green Gate...

Vasos de melamina de colorines:

Buenos consejos:

Delantales tipo cómic:

Delantales de princesa para niña:

Delantales de la marca española I love aprons, que algunos conoceréis. Me acerqué tres veces, y estaban siempre rodeados, casi inundados, de clientas comprando como locas! Antes de irme decidí acercarme una cuarta vez, y estuve un rato largo charlando con los dueños, que son de Vinarós y encantadores. Habían vendido tanto, que no les quedaban los cuatro modelos que más me gustaban: una pena para mí, pero qué gusto ver a una empresa española triunfando de esa manera!!! Merecidísimo además, porque los delantales son preciosos. Finalmente encontré uno que me gustó y me regalaron la cinta del pelo a juego! Se iban directamente desde París al Cake & Bake Show de Londres.

Había incluso un puesto de libros de repostería, pero qué decepción que estuviera el libro de Michalak y no Michalak en persona!!

También había bisutería para reposteras y golosas:

Algo muy curioso, vinos de aperitivo con sabor a postres: tarta de limón y merengue o tarta de fresas. Probé el de tarta de limón, y la verdad es que no me gustó nada. Era como un martini blanco con muchísimo limón, pero nada dulce, con lo cual el merengue estaba totalmente ausente... Valía 12€ la botella y se las quitaban de las manos!

Last but not least: KITCHEN AID!!!!!!!!!!!!!!!!!!

Me acerqué dos veces al puesto a tocarlas, acariciarlas, decirles que las amo....

Me encontré con una señora mayor que estaba mirando el nuevo modelo. Le dije que era mi sueño tener una y me dijo: "no te arrepentirás, yo hace años que tengo la mía, y la adoro. Siempre les digo a mis hijos que si tuviera que elegir entre la KitchenAid y ellos, me quedaría con la KitchenAid!" jajajajaja 

Al decirle a la chica que vivía en Bruselas, me comentó que las que se venden en Europa se fabricaban en Bélgica. Así que voy a averiguar dónde está la fábrica y organizar un pequeño asalto. He dicho.

[Aisha, vecina, si te animas avísame y vamos juntas!!]

Pues no, no me compré la KitchenAid, porque no me cabe en mi cocina liliputiense. Sólo tengo un cuadradito de encimera: si coloco ahí la KitchenAid, me quedo sin sitio para cocinar, y adiós al blog. Sería el colmo, no?

Así que compré cosas que sí que caben en mi cocina (y en los muebles del salón invadidos por cosas de repostería), como por ejemplo estas cápsulas de cartón para muffins, cupcakes y bizcochos:

(me gustó el negro, está bien salirse un poco de tanto rosita!)

Una hojas estructuradas y de transfer para chocolate... Nunca lo he probado, a ver qué tal me sale!

Unas varillas (tamaño normal) de silicona, una manga pastelera de silicona (he oído hablar maravillas de ellas) y dos moldes de silicona que se salen de lo habitual: uno de palitos y uno de mini esferas. Se me ocurren muchos usos, a ver si luego soy capaz de poner en práctica lo que he pensado!

¡¡Me enconté en la Feria con Martha!! No conocía la línea de productos Martha Stewart Crafts, pero me gustó mucho lo que vi... Me compré un juego de plantillas y dos juegos de cajas ideales para montar uno mismo.

La chica de KitchenAid me dio un catálogo del robot Artisan (me pareció un detalle, pero ahora no sé si era un poco malvado por su parte...) y un librito de recetas que se pueden hacer con todos los accesorios y robots KitchenAid (y sin ellos, obviamente).

¡Éste es el delantal de I Love Aprons y la cinta del pelo! Como diría mi amiga Carmen: súper mignon.

Cayeron algunas cositas más, pero ya las iréis viendo según las vaya utilizando en mis recetas...

Nos vemos el viernes con una nueva receta un poco especial, porque será mi participación al concurso #cocinadecine del blog April's Kitch!