Iba a escribir esta entrada diciendo que el albaricoque es mi fruta preferida, pero es posible que dentro de unas semanas os diga que es la cereza, o la sandía, y vais a terminar pensando: a ver si se aclara. Con toda la razón! Así que moderaré un poco mi pasión albaricoquera y diré que se encuentra entre mi TOP 5 de frutas preferidas. No es fácil encontrar buenos albaricoques: están malísimos cuando están duros o harinosos o ácidos. Al revés que las cerezas, que pueden estar mejor o peor pero nunca están malas, los albaricoques sí que pueden estar malos. Pero cuando están dulces, blanditos, jugosos... es que se me saltan las lágrimas. (sí, vale, soy una exagerada, pero no me querríais igual si no lo fuera).
Me pasa algo extraño con las fresas, porque no me gustan así tal cual, ni con azúcar ni con zumo ni con nata, pero sin embargo me enloquecen los postres con fresas de todo tipo: tartas, helados, coulis, mermelada... Con el albaricoque me pasa al revés: me gusta tanto al natural, que casi nunca me he molestado en usarlo para algún postre. Si no llega a ser que fui al mercado y al llegar a casa me di cuenta que había comprado albaricoques para un regimiento, no me habría molestado en buscar una receta que los llevara... Y tengo que decir que esta Tarta Tatin me encantó. Me parecía un poco complicadilla, pero la elegí por la combinación con sésamo, que me pareció muy original, y el sabor nos resultó novedoso y delicioso. ¿Os atrevéis?
Consejos:
> Tenía tan poca fe sobre mis posibilidades de éxito con esta tarta que no hice fotos de las diferentes etapas... y luego me arrepentí!
> Os recomiendo que metáis bien la pasta por los bordes, yo no lo hice y la tarta no tiene el borde característico que debería.
> No sé si es por la masa que es muy frágil, pero es un poco difícil de servir trozos bonitos y enteros. No le importó a nadie, claro...
> Como veis no fue nada difícil desmoldarla y no se me quedó ningún albaricoque pegado, así que no os preocupéis por esa etapa.
> Recomiendo servir tibio con una bola de helado de vainilla, hmmmm!
- unos 10-12 albaricoques
- 140g (120g + 20g) de mantequilla a temperatura ambiente
- 1 yema de huevo
- 50g (25g + 25g) de sésamo
- 180g de harina
- 50g de azúcar glas
- 30g de azúcar
-1 pizca de sal
Elaboración:
En un gran bol, batir 120 g de mantequilla con el azúcar glas, la sal y la yema de huevo.
Incorporar 25g de semillas de sésamo y la harina.
Formar una bola y dejarla reposar en la nevera mínimo 1 hora.
Lavar, cortar por la mitad y deshuesar los albaricoques. Reservar.
En un cazo, hacer un caramelo con el azúcar en polvo y la mantequilla, dejando que se derrita a fuego medio sin moverlo. Una vez que tenga un color bien tostado (¡cuidado que no se queme!), verter en el molde y espolvorear los 25g de semillas de sésamo restantes.
Colocar sobre el caramelo las mitades de albaricoque, con la parte abombada hacia abajo. Si el caramelo endurece un poco, no os preocupéis que en el horno se ablandará de nuevo!
Precalentar el horno a 210ºC.
Enharinar la encimera, sacar la masa de la nevera y formar un circulo con ayuda de un rodillo enharinado. Cortar con ayuda de un plato o molde para que quede bien redondo.
Cubrir los albaricoques y meter la masa por los bordes.
Hornear 40 minutos.
Dejar enfriar 5 minutos antes de darle la vuelta sobre un plato y servir, si es posible, tibio.
Yo soy una loca de la fruta de verano y me gusta comerla tal cual, que cuando quiero hacer un postre con ellas ya no me quedan!! Con albaricoques no he hecho nunca nada y esta tarta tiene que estar tremenda y con ese toque de sésamo todavía mejor!!
ResponderEliminarBesotess
Eres como yo en cuestión de frutas!! Yo podría alimentarme sólo con frutas (y pan xD) y más con las de verano. Siendo de Murcia, la fruta de verano la tengo además muy asociada a mi niñez y adolescencia, siempre me ha encantado y mi padre, como trabaja con agricultores, siempre nos ha traído cajas llenas estupendas.
ResponderEliminarLos albaricoques son de mis favoritas, sin duda alguna. Tuvimos un árbol en el campo durante muchos años y era una gozada recolectar sus frutos, cuando los pájaros nos dejaban, jajaja. Me encanta también al natural y tengo que hacer esfuerzos para guardar albaricoques para cocinar con ellos, pero recetas tan ricas como tu tarta tatin bien merecen la pena :).
Un abrazo
Al igual que a ti me encanta también la fruta y diría casi toda, este tatin que has preparado se ve muy rico y con el seamo le tiene que dar un toque genial.
ResponderEliminarUn beso
Como me gusta las tartas tatin!!!!! Y esta de albaricoque con semillas de sésamo promete y mucho!!!! Mmmmmm
ResponderEliminarUn besito,
Sandra von Cake