Los bizcochos salados no me suelen convencer. He probado varios y todos me parecían sosos. Suelen ser de jamón y queso y no suelen tener mucho sabor. Sólo he encontrado dos excepciones: uno de tomates cherry y pesto, y éste de salmón, que es una auténtica exquisitez. Si queréis quedar como reyes o reinas, os lo recomiendo!
Tiene muchos ingredientes así que lleva su tiempo pesar y prepararlo todo. Aunque luego es mezclarlo todo, hornearlo y listo!
Consejos:
> las cebolletas ideales para este bizcocho son las delgaditas (en la foto, a la derecha). En francés se llaman cébettes y en inglés scallions o green onions y no son de sabor tan fuerte como las cebolletas gordas (en la foto, a la izquierda).
> las semillas de lino son indispensables! Dan un crujiente riquísimo.
Ingredientes:
- 250g de harina
- 2 cucharaditas de levadura en polvo
- 4 huevos medianos
- 75g de mantequilla derretida (templada)
- 75g de aceita de semilla de uva (o girasol)
- 200 ml de leche
- 1 cucharadita de sal
- 6 cebolletas finas (unos 50g)
- 150g de queso emmental rallado
- 75 g de salmón ahumado
- 100g de salmón fresco
- 100g de aceitunas
- 60g de semillas de lino
- 2 cucharaditas de semillas de sésamo
- 100g de aceitunas verdes sin hueso
- 50g de gruyere rallado (o emmental otra vez)
Para decorar:
- unos 100g de salmón ahumado
- semillas de sésamo
Elaboración:
Precalentar el horno a 160º C con la rejilla en la mitad inferior del horno.
Engrasar el molde con un poco de aceite y espolvorear con harina.
Mezclar la harina y la levadura en un bol grande. Batir levemente los huevos y añadirlos a la harina. Incorporar la mantequilla derretida y el aceite. Añadir la leche y la sal, las semillas de lino y de sésamo, y el queso emmental. Mezclar bien.
Añadir el salmón fresco (crudo) y el salmón ahumado cortados en trocitos.
Incorporar las aceitunas en rodajas así como las cebolletas picadas.
Verter en el molde y repartir el queso rallado por encima.
Hornear a 160ºC los diez primeros minutos, y luego bajar la temperatura a 140ºC durante unos 40-50 minutos, hasta que el queso esté bien tostado y un palillo insertado en el bizcocho salga limpio.
Sacar del horno, dejar enfriar y desmoldar.
Decorar con el salmón ahumado y espolvorear con sésamo.
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