Bizcobolas

La última vez os traje la receta de la mejor tarta de chocolate del mundo mundial y del espacio intersideral: Muerte por chocolate.

Comenté de pasada que desmoldar una tarta hecha en un molde de Bundt Cake es complicado, y quizá me quedé corta. Mis dos primeros ensayos de bizcochos bundt fueron desastrosos. Luego cambié de receta, por si era la receta y no mi ineptitud, y lo intenté con Muerte por Chocolate. Más desastres. Y eso que untaba cada resquicio con pincel, primero con mantequilla, luego con aceite a ver si salía mejor, espolvoreaba harina o cacao, comprobaba que estaba bien cubierto el molde por todas partes... y nada. Al final compré un spray Wilton que se llama Bake Easy y santo remedio. No me gusta usar sprays y nunca lo uso para otras tartas o bizcochos, pero para el molde de bundt cake, me he resignado.

Al cabo del tercer desastre, decidí documentarlo. 

   

                  

   Intento nº1 - desastre nº1

Intento nº2 - desastre nº 2

Y luego llegó la gran pregunta: ¿qué narices hago con este bizcocho destrozado? El plan A era comérmelo yo todo entero, pero quizá habría muerto. El plan B era llevarlo así, en trozos, al trabajo o a casa de algún amigo, pero entonces habría muerto mi reputación. ¿Qué podía entonces hacer? Darle una segunda vida.

Busqué en Google qué hacer con restos de bizcocho y me salieron muchas ideas, algunas raras, otras menos. La más seductora: los cake pops. Hubo un tiempo, cuando Pastélite recibía y entregaba pedidos por Alicante, en que hacía cake pops, que los niños adoraban (en especial Isaiah, el hijo de mi amiga Michelle!).

los cake pops de Pastélite

Me daba muchísima pereza volver a hacerlos porque daban mucho trabajo. Había que hacer un bizcocho, mezclarlo con un frosting de queso y mantequilla, hacer las bolas, semi congelarlas, bañarlas en chocolate de colores, pincharlos en algún sitio, decorar... Pufff.

Así que hice una versión exprés, igual de rica pero mucho más rápida de hacer y nacieron (redoble de tambor): las bizcobolas!!!

Consejos: 

> Por una vez, no hay cantidades ni medidas exactas. ¡Aprovechad!
> Sirve cualquier bizcocho que sea lo suficientemente húmedo.
> Os recuerdo que para derretir chocolate al baño María debe estar en un recipiente que no toque el agua y el agua no debe hervir. Al microondas se pone en un bol a temperatura media y cada 30 segundos se va sacando para moverlo.

Ingredientes:

- 1 bizcocho (por ejemplo la mitad de la receta de Muerte por chocolate)
- chocolate blanco, chocolate negro, y perlas de colores.


Elaboración:

Precalentar el horno a 180ºC.
Hacer bolitas del tamaño que queráis usando los restos de bizcocho. Apretar bien.

Colocar sobre un papel de horno en la placa.

Hornear unos 15-20 minutos. Se trata sólo de secarlas un poco para que queden levemente crujientes por fuera y sean más fáciles de glasear.

Derretir el chocolate, por ejemplo blanco, al baño María (o al microondas). Pasar cada bola por el chocolate, con ayuda de dos tenedores.

Colocar sobre una rejilla y decorar con las perlas sin esperar.

Yo pongo un papel de cocina debajo para que caigan ahí las gotas de chocolate.

Dejar secar y servir.

Se pueden conservar en un tupperware en la nevera, pero sacadlas por lo menos una hora antes de comerlas, porque como siempre digo el chocolate necesita estar a temperatura ambiente para tener todo su sabor.

Son ideales para cumpleaños infantiles o meriendas tipo buffet! Y son igual de deliciosas que la tarta Muerte por Chocolate, por supuesto...