31 de enero de 2014

Brownies con avellana caramelizada

foto Gettingbetter
Queridos amigos, seguidores y lectores de este blog: ¡inauguramos pestaña "sobre mí"!
Pensé que era un poco feo cotillear sobre los otros blogueros y no dejar que cotilleen sobre mí, así que me puse a bucear en las fotos de mi iPhone en busca de inspiración, sin saber muy bien qué contar y qué podría interesar... Y el resultado lo tenéis ahí arriba, en la pestaña Sobre mí.


Y ahora vamos con la receta de hoy. Debo confesar que no me entusiasman los brownies. Me gusta el chocolate, sí, al fin y al cabo nací en Suiza y vivo en Bélgica: sería imperdonable que no me gustara. Pero con un trocito de chocolate con avellanas aquí y un poco de salsa de chocolate con algún postre que lleve frambuesas, soy feliz. Con la única excepción, quizá, de mi Tarta Sacher. Está mal que yo lo diga, pero es divina!!!

No soy de pedir mousse de chocolate en un restaurante de postre, ni menos mi-cuit ni coulant de chocolate, que creo que me empalagaría para un año entero. Peeeero, he tenido y tengo amigos MUY chocolateros. Pero mucho. Y cuando digo mucho, es m-u-c-h-o. Gente que se alimentaría exclusivamente de chocolate. Y claro, uno se debe a su público!!

Así que decidí probar esta receta, y me convenció. Estos brownies son tiernos y ligeros (en la foto parecen secos, pero no lo son para nada) sin ser tan "pastosos" como otros que he probado, y las avellanas caramelizadas les dan un crujiente que me gusta mucho.



Consejos:

> Como todos los pasteles de chocolate negro, quedan mucho mejor al día siguiente. Así que a pesar del increíble olor: ¡paciencia! 
> Lo que sobre, se puede envolver en papel de aluminio y conservar en la nevera.
> La "diseminación" del bloque de avellanas caramelizadas, que parece una tontería, es una tarea sumamente peligrosa. La primera vez, lo intenté hacer a mano, sin tener en cuenta lo duro que es el caramelo y lo lleno de aristas que estaba, y terminé sangrando! Así que recomiendo algún instrumento tipo mortero o rodillo para darle golpecitos sin quedar hecha(o) un cristo. 

Ingredientes:

- 200 g de chocolate negro
- 115 g de mantequilla
- 3 cucharadas soperas de cacao en polvo sin azúcar
- 3 huevos
- 275 g de azúcar
- 1/2 cucharadita de sal
- 140 g de harina
- 2 cucharadas soperas de azúcar glas

- 150 g de avellanas enteras
- 70 g de azúcar

Elaboración:

Meter las avellanas en un robot y darle un par de veces al botón para picarlas un poco. Reservar por una parte los trozos de avellana y por otra el polvillo que se ha formado. Para los pobrecitos que, como yo, no tengan robot, podéis hacer lo mismo con un buen cuchillo de chef. (no tener robot, vale, pero no tener cuchillo de chef es imperdonable) (el mío es de Ikea, por cierto, y me encanta)

Preparar sobre la encimera un tapete de silicona (o papel vegetal).

Poner los trozos de avellana en una sartén antiadherente (sin mantequilla ni aceite ni nada) a fuego vivo, y tostarlas. Reservar en un bol, y poner en esa misma sartén el azúcar. Añadir una cucharadita de agua. Dejar a fuego medio hasta que se convierta en caramelo dorado. Añadir entonces los trozos de avellana y mover rápidamente con una espátula para cubrir todas las avellanas de caramelo.

Sin dejar que se seque, verter sobre el papel de silicona, a ser posible en capa fina. Dejar enfriar. Cuando haya enfriado, separar los trozos de avellana dándoles golpecitos con un mortero o rodillo.

Precalentar el horno a 180ºC. Forrar un molde cuadrado de 24cm con dos hojas largas de aluminio, una en cada dirección. Con un pincel, engrasar con un poquito de aceite.

Al baño maría (como sabéis, el bol no debe tocar el agua), fundir el chocolate troceado con la mantequilla. Cuando no quede ningún trozo visible, apartar del fuego e incorporar el cacao.

Mientras esto enfría, batir en un bol los huevos, el azúcar y la sal. Añadir el chocolate fundido, mezclar, e incorporar la harina. Añadir también el polvillo de avellanas que se formó en el robot!

Verter sobre el molde preparado, alisar la superficie con una espátula. Colocar las avellanas caramelizadas por encima y hornear durante 35-40 minutos. Tiene que estar como "inflado", y al pincharlo con un palillo, deben quedar trocitos pegados.

Dejar enfriar unas 2 horas antes de sacarlo del molde con el papel de aluminio y cortarlo en cuadraditos.


Fuente: Chocolate and zucchini


11 comentarios:

  1. Te ha quedado fabulosos, me encanta. Un abrazo, Clara.

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  2. Nunca he probado con avellanas, ¡y mira que me gustan!
    ¡Muy buena opción!
    Un beso,

    Iñaki

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  3. Con lo que me gusta el brownie y las avellanas, menuda combinación más rica!!

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  4. Qué delicia! La madre de una amiga los prepara que da gusto, son lo más rico que he comido! Ah! Y ahora voy a cotillear un poco esa sección :D

    Besos y feliz finde!

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  5. yo no debería de haber entrado a verte

    y menos un viernes, con tantos días para hacer algo así de rico riquísimo

    un bsz

    Luna

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  6. El Brownie ya de por sí esta buenísimo pero con las avellanas caramelizadas... Mmmmm

    Un besito,
    Sandra von Cake

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  7. Qué rico!! Cuando he leído el comienzo he pensado...y cómo parte avellanas caramelizadas con la mano? Pensaba que eran enteras! Ya te veía yo como el increíble Hulk! jajaj
    A mí sí me gustan los brownies, pero nunca he hecho uno. Será cuestión de probar :)
    besos

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  8. Qué buena pinta!!! El brownie es éxito asegurado en mio casa, nos encanta!!!

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  9. Hola preciosa, ya te dije cuando publicaste la entrada que me encantaba la receta pero el post tiene que ser de miembros de red,facilisimo ¿tu no estas verdad?. Como no veo la insignia por ningun lado pues he pensado que no eres miembro porque sino no dudes que lo habría incluido. Un beso

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